InicioDesarrolloEspiritualidad¿Qué opina el Papa Francisco sobre el aborto?

¿Qué opina el Papa Francisco sobre el aborto?

Fue verdaderamente impresionante el alud de comentarios sensacionalistas publicados en diversos medios de comunicación de supuestos “sociólogos o antropólogos de la religión” acerca de los cambios que debería de haber dentro de la Iglesia con motivo de la renuncia como Romano Pontífice de Benedicto XVI.

Y no sólo eso, sino que de pronto aparecieron una  lista de personajes que se autodenominan “teólogos”, que  también se sumaron a señalar cómo debería de ser “la Iglesia de los tiempos modernos”.
¿Quién es un verdadero teólogo? Aquél que en primer lugar obedece al Magisterio de la Iglesia, sigue fielmente las interpretaciones de las Sagradas Escrituras (Biblia),  la Tradición de los Santos Padres… En definitiva, los estudiosos que acogen con humildad el mensaje evangelizador de Jesucristo y que los Romanos Pontífices han enseñado a lo largo de XXI siglos de cristianismo.
Entonces, estos teólogos profundizan e investigan en el Credo, la Moral y los Sacramentos con la finalidad de prestar un servicio a la Iglesia. Tenemos las valiosísimas aportaciones de muchos de ellos que han enriquecido el “Depósito de la Fe”. Basta mencionar, por ejemplo, el intenso trabajo de muchos de ellos para elaborar el actual “Catecismo de la Iglesia”, ordenado por el Beato Juan Pablo II y coordinado por el entonces Cardenal Joseph Ratzinger.
Pero me quiero referir a un tema en particular que hace pocas semanas fue muy debatido: “que la Iglesia ‘moderna’ debería de permitir el aborto”.
Tengo en mis manos un documento que recoge las palabras de una homilía del entonces Cardenal Jorge Mario Bergoglio y que pronunció el 16 de septiembre de 2012, de modo claro y enfático afirma: “El aborto nunca es la solución. Debemos escuchar, acompañar y comprender desde nuestro lugar a fin de salvar las dos vidas: respetar al ser humano más pequeño e indefenso, adoptar medidas que puedan preservar su vida, permitir su nacimiento y luego ser creativos en la búsqueda de caminos que lo lleven a su pleno desarrollo”.
¿Y qué nos dice el Catecismo de la Iglesia en sus puntos 2270 y ss?: “La vida humana debe ser respetada y protegida de manera absoluta desde el momento de la concepción. Desde el primer momento de su existencia, el ser humano debe ver reconocidos sus derechos de persona, entre los cuales está el derecho inviolable de todo ser inocente a la vida”.
Y más adelante dice: “El derecho inalienable de todo individuo humano inocente a la vida constituye un elemento constitutivo de la sociedad civil y de su legislación”. (…) Puesto que debe ser tratado como una persona desde la concepción, el embrión deberá ser defendido en su integridad, cuidado y atendido médicamente en la medida de lo posible, como todo otro ser humano”.
En esta misma línea,  hay una encíclica que, en  mi opinión, es fundamental para el análisis y reflexión sobre el respeto a la vida humana y que fue escrita por el Beato Juan Pablo II y  titulada: “El Evangelio de la Vida”.
El Papa expone la altísima dignidad que tiene todo ser humano y que Dios es el único Señor de la vida y la muerte. Que la vida humana es sagrada puesto que parte de la acción directa del Creador.
Por lo tanto, aunque haya personas en nuestro tiempo que pretendan legitimar el aborto (legisladores, intelectuales, pensadores, organismos internacionales…) y en algunos países sea como una corriente en boga, nunca hemos de perder de vista aquello que el Beato Juan Pablo II enérgicamente afirmaba: “¡Sólo Dios es dueño de la vida humana!”.
Por lo tanto, el aborto es y siempre será un grave homicidio contra un ser inocente. La Iglesia y todos los Papas en forma unánime así lo han sostenido a lo largo de la historia de la Iglesia.
Estas declaraciones que originalmente mencionaba, del Cardenal Jorge Mario Bergoglio, ahora Papa Francisco, no hacen sino continuar con las enseñanzas perennes de la Iglesia fundada por Jesucristo.
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